El famoso ambiente de Fratton Park puede ser la clave para que Portsmouth salga de apuros esta temporada.
Su victoria por 2-1 sobre el Blackburn fue un recordatorio del poder que puede tener su afición local en los partidos y deben aprovecharlo más de cara al futuro.
Una vez que el equipo local se acomodó en el juego, la multitud se mostró eléctrica y ruidosa para ayudarlos a poner fin a una racha de tres juegos de liga sin ganar.
Este partido fue una prueba de que puede ser una herramienta poderosa en su búsqueda de la seguridad en esta campaña.